MEMPHIS DEPAY esperaba disfrutar su experiencia en BRAZIL, pero el neerlandés se ha visto envuelto en una gran polémica con los Auriverde. Hace unos días, el excapitán del OL logró su primer gran éxito con los CORINTHIANS al obtener su primer título con el nuevo equipo. Sin embargo, este triunfo ha sido opacado por su comportamiento al demorar el juego y posar los pies sobre el balón aún en juego, lo que desencadenó una pelea y un escándalo mediático.
La CBF ha intervenido, indicando que "el Comité de Arbitraje de la CBF ha pedido a los árbitros que, tras identificar la conducta mencionada, la sancionen con un tiro libre indirecto a favor del equipo contrario, a ejecutarse en el lugar de la infracción, y que amonesten al infractor con una tarjeta amarilla", según un nuevo reglamento del Campeonato brasileño. Varios jugadores, como NEYMAR, han expresado su indignación por esta decisión: “el fútbol se está volviendo cada vez más aburrido”, comentó el jugador del SANTOS.
Muchos esperan que la CBF retroceda y elimine esta regla. "Lo que no podemos perder en BRAZIL es la alegría de jugar al fútbol. BRAZIL es cinco veces campeón del mundo gracias a la alegría de jugar. Me parece absurdo y no estoy de acuerdo”, explicó el exinternacional FELIPE MELO. “¿Por qué los jugadores ya no tienen la misma personalidad? Otra regla que arruina el placer de nuestro fútbol. Eso es parte del juego. ¿Sancionar al que tiene el balón? En fin…”, añadió DENILSON, ganador de la Copa del Mundo 2002 con la Seleçao.
Este lunes, MEMPHIS DEPAY rompió el silencio con un comunicado en el que explica que "vino a BRAZIL para vivir el Jogo Bonito con mis propios ojos. El fútbol brasileño está en pleno auge… y merece visibilidad mundial. La alegría y la pasión que expresamos en el campo no deberían tener límites. Concentremos nuestros esfuerzos en las reglas que pueden mejorar el deporte y en los aspectos comerciales del fútbol que benefician a clubes, aficionados y jugadores, en lugar de en decisiones absurdas", compartió en sus redes sociales.
Otras voces también se han alzado para criticar este tipo de gestos en el campo, argumentando que no son útiles y que incitan a desestabilizar al adversario. “El jugador que se sube al balón viola la ética. El recordado SÓCRATES se oponía a estas actitudes. Decía que intentar desestabilizar al oponente con un regate es una cosa, pero burlarse de él es otra”, se puede leer en un artículo de UOL Esporte. La polémica en BRAZIL no parece tener fin.