La historia entre FABIO GROSSO y el OL no duró mucho. Incapaz de enderezar el rumbo tras el mal inicio de LAURENT BLANC en la temporada 2023/2024, el italiano solo estuvo al frente durante 7 partidos, cosechando una única victoria. Ahora se encuentra en un momento más favorable en SASSUOLO, actual líder de la SERIE B. En una entrevista con LA REPUBBLICA, el campeón del mundo de 2006 reflexionó sobre su experiencia en LYON y, en particular, sobre el lanzamiento de una botella que sufrió en el autobús del club durante un desplazamiento a MARSELLA. Este incidente provocó el aplazamiento del partido, ya que el técnico, en estado de shock, tuvo que recibir puntos de sutura por encima del ojo y en un párpado. No ha olvidado este episodio traumático.
"Los ultras de MARSELLA lanzaron una botella contra nuestro autobús justo cuando me había girado para bajar la ventana. Quizás eso me salvó la vida, porque de no ser así, la botella me habría alcanzado en la sien. En cambio, me golpeó debajo del ojo izquierdo y me dejaron 15 puntos de sutura. En ese momento, comprendí lo que significa arriesgarse a 'morir al instante': es cuestión de un segundo, de una situación que puede cambiar de un momento a otro", recordó un año y medio después del incidente. Además, esta semana tuvo que pasar de nuevo por el quirófano debido a esa lesión. "Ayer me extrajeron tres fragmentos de vidrio que los médicos franceses habían olvidado. Si bajo el párpado, se puede ver la cicatriz; no es nada grave. Pero al menos, estoy aquí para contarlo".