No solo hubo fútbol en LYON esta noche, ni tampoco muchos goles. En LONDRES, el TOTTENHAM recibió al EINTRACHT FRANKFURT en el marco de los cuartos de final de la Liga Europa. Un enfrentamiento incierto tras 90 minutos (1-1), cuya resolución definitiva conoceremos la próxima semana en ALEMANIA. Sin embargo, no era recomendable llegar tarde a este partido de ida, ya que los compañeros de HUGO EKITIKE rompieron el cerrojo inglés desde el sexto minuto, gracias al propio EKITIKE (0-1).
Tras una pérdida de balón evitable de MADDISON, el francés fue asistido por SKHIRI, se enfrentó a su marcador y, después de recortar, se colocó en posición de tiro para batir a VICARIO con un disparo rasante desde la entrada del área (0-1, 6'). La respuesta inglesa llegó de los pies de PEDRO PORRO. Tras un espectacular regate de MADDISON en la banda, el español igualó el marcador con una espectacular chilena (26'). Una merecida recompensa para el dominio territorial de los SPURS, aunque su esfuerzo no se vio reflejado en el marcador tras el descanso.
Un disparo de BERGVALL impactó en el travesaño de KAUA SANTOS, mientras que el joven portero brasileño mostró su calidad deteniendo intentos de SON (57'), BENTANCUR (58') y MADDISON (59'). Las sustituciones de SPENCE, TEL, SARR y RICHARLISON resultaron inútiles para el TOTTENHAM, que deberá ser más eficaz la próxima semana si quiere alcanzar las semifinales. Esto también se aplica al BILBAO, que no pudo decidir el partido contra los GLASGOW RANGERS, terminando en empate (0-0).
Pese a no ser favoritos en papel, los escoceses lograron mantenerse firmes para limitar la influencia de los hermanos WILLIAMS, incluso con un jugador menos durante más de 80 minutos y luego a 9 tras la lesión de STERLING en los últimos segundos. Casi sucumbieron tras una falta de mano de STERLING en su área, pero LIAM KELLY realizó una gran intervención al detener un penalti de BERENGUER (82'). La imagen de la noche fue la ovación del IBROX STADIUM para BAILEY RICE, un joven del club, que fue evacuado en camilla tras un fuerte golpe en el cuello. El último cuarto de final también terminó en empate, con carácter por parte del OL frente a MANCHESTER UNITED (2-2).